¡Conoce el Viaje que hace Teo para liberar su hábitat del plástico!

Ignorando las recomendaciones de la Alianza México sin plásticos y de más de 200 organizaciones de la sociedad civil y expertos, la Cámara de Senadores aprobó reformas en la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR), que perjudican al medio ambiente, beneficiando sólo a la industria.

Construyeron la ley solo con sus prioridades cuando deberían regularla.

¡Todavía no es demasiado tarde, las diputadas y diputados pueden cambiar la ley!

No dejemos que los intereses políticos y empresariales estén por encima del bienestar de la gente y el medio ambiente. Los océanos y la biodiversidad nos necesitan.

¡Exige a la Cámara de Diputados que prohíba los plásticos de un solo uso y haga responsables a las marcas de sus desechos plásticos!

- ciberactivistas ya se unieron, ¡sólo nos faltas tú! Ayúdanos a llegar a firmas.

¡Exijamos leyes que prohíban los plásticos de un solo uso!

Suma tu nombre y exige a las diputadas y diputados la prohibición de plásticos desechables.
¡Protejamos nuestros océanos y nuestra biodiversidad!

Sitio seguro. Al firmar la petición, acepto recibir información de Greenpeace México y estoy de acuerdo con el aviso de privacidad.

Asunto: ¡Desplastifiquemos México!

Sen. Raúl Bolaños-Cacho, presidente de la Comisión de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático 

Mesa Directiva del Senado de la República

Senadores y Senadoras

P R E S E N T E

Por medio de la presente y en mi carácter  de ciudadano/a informado/a y preocupado/a por la contaminación plástica en el mundo, en ejercicio del derecho de petición y de información, solicito de manera respetuosa acciones concretas para evitar que cada año millones de toneladas de plástico vayan a parar a los océanos, agudizando la crisis de pérdida de biodiversidad y  climática que vive nuestro planeta.

Por esta razón le pido al Senado mexicano a través de las y los integrantes de esa Comisión de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático, en particular de su presidente el Sen. Bolaños-Cacho, y de su Mesa Directiva, la necesidad de actualizar el marco regulatorio mexicano para solucionar el problema de raíz, lo que implica reducir desde su origen la contaminación por plásticos de un solo uso. Para ello es necesario:

Establecer prohibiciones a los plásticos de un solo uso que impulsen las medidas estatales ya aprobadas en la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR). Estas prohibiciones contribuyen a generar menos basura plástica que finalmente termina siendo una carga para los municipios donde se genera e inunda nuestros ecosistemas. Poner la responsabilidad de manera equitativa en los diferentes actores de la sociedad. Por ejemplo, los grandes productores, importadores y distribuidores destinan hasta el 48% de la fabricación de plásticos en México para envases, empaques y embalajes plásticos que les permiten comercializar sus productos. Además de que venden un sin número de productos desechables, que se usan por unas cuantas veces y después se tiran. Es por ello que la responsabilidad compartida no es suficiente para poner un freno a esta contaminación, se debe agregar la figura de la responsabilidad extendida hacia los productores (incluyendo importadores y distribuidores) para que sean ellos quienes apliquen los mecanismos necesarios para ofrecer a las y los consumidores opciones libres de plástico, así como diseños ecológicos que eviten la generación de residuos, y para alcanzar el 100% de la recuperación de los residuos ya generados si de verdad se quieren manejar bajo un modelo de economía circular.

Si queremos contribuir a la lucha climática y disminuir la crisis de la biodiversidad no basta con fomentar el reciclaje. Este último es solo una parte de la solución, no la solución que pondrá fin al problema.Tampoco lo es la incineración/co-procesamiento de residuos, ya que causa graves impactos ambientales y sociales.   El cambio es cultural, nos involucra a todos, pero por sobre todo a quienes fabrican estos contaminantes con la falsa promesa de que en el futuro incierto serán reciclados. Debemos reducir la producción y el consumo de plásticos de un solo uso,  sólo así podremos hacer frente a esta contaminación desde su raíz.

¡Reducir desde el origen es la clave!